domingo, 28 de septiembre de 2014

"Está..."

No sé que microbio universal trajo hasta a mí la entrevista de Fantino a Rolón, donde una suerte de 6 minutos de oídos abiertos pueden no darte respuestas a las preguntaas más existenciales que la propia existencia, pero sí servirte de signo de interrogación para cerrar oraciones inconclusas.
Y recordé que olvidar no era tan sencillo como pronunciar la palabra "Olvido"; que la vida es correr riesgos de toda raza y color, incluso aquellos en los que "hacer nada, no es nada fácil"; que no podemos vivir del pasado porque sino las arrugas de la frente edifican un acordeón cuyo sonido es lo más parecido a la amargura y la frustración; que tampoco podemos vivir del futuro porque los viajes no deben ser comidos, sino saboreados, y mirar mucho hacia adelante nubla la vista de expectativas y ansiedad... y que tampoco podemos vivir del presente, aunque sea lo único que nos queda, porque biológicamente no estamos encaminados a existir con recuerdos a corto plazo (si asi fuera, no existirían créditos ni financiamiento seductores, ni nada por el estilo).

"A veces cuesta darse cuenta que la felicidad está en una charla de 20, 30 minutos con tu viejo o con tu abuelo, o tomar unos mates con tus amigos, o irte a tirar al pasto a mirar el cielo con tu mujer o con tu novia... está en esas pequeñas cositas..."
Está en esos almuerzos y siestas vacacionales junto a cinco personitas más, que hicieron de mi ajetreada infancia, mi lugar preferido en el tiempo.
Está en la primer semana de septiembre del 2004, con cientos de almas en común unión y experimentando y sintiendo la máxima expresión de fe y la pureza del alma.
Está en la noche de aquel 18 de mayo de 2007, congelado, pero de sonrisas propulsoras de calor y la compañía más agradable y brillosa del universo.
Está en ese fin de semana de septiembre del 2008, en que después de dos meses sin ver a mi peladin favorito, volvió por una pausa a la quimioterapia y para devolvernos el oxígeno y la felicidad que había quedado suspendida en el aire.
Está en ese 13 de mayo del 2009, en el que un "Chau Flor, suerte." se convirtieron en las mejores palabras para dormir en paz, y recordar con una sonrisa muy inmensa, que tengo el placer de haber conocido a alguien que me cuida desde el cielo.
Está en ese baile con mis amigas, disfrazadas todas de aves del corral, llenas de plumas y colores estridentes, haciendo orgullosamente el ridículo con la simple finalidad de divertirnos!
Está en ese 25 de junio, con amigos que la vida puso en mi camino, que coreaban conmigo un sinfín de cantitos de aliento.
Está en muchos rincones de mi casa... arriba del piano y dentro de un florero, en el árbol del patio, en el abrazo de mamá, en la sonrisa y el brillo de los ojos de mi abuelo, en las carcajadas de mi hermano, en sentir el vientito en la costanera, en morir de ternura con el perro, en hacer el ridículo, en desentonar con el paisaje, en gritar, llorar, cantar, en todo...

LA FELICIDAD ESTÁ... no importa donde, ni como, ni que tan visible o extraordinaria sea. ESTÁ.